En Caleta Huellelhue y Cóndor
Una excursión a las aisladas caletas “Huellelhue” y “Cóndor”, de la Comuna de Río Negro en la Provincia de Osorno, que forman parte de la red de parques huilliches “Mapu Lahual”, realizó Sernatur con los tour operadores "Darwins Trails Y Andes Nativa", para dar a conocer este destino turístico y promover las actividades que se allí realizan.
El viaje además, contempló la capacitación a la comunidad local en gastronomía y el incentivar la presentación de proyectos de turismo a fondos públicos.
Al respecto, el Director Regional de SERNATUR Los Lagos, Fernando Ortúzar, agregó que “con estas acciones de capacitación y promoción impulsadas por SERNATUR, el turismo será una realidad que ayudará a complementar ingresos para las comunidades rurales y aisladas, contribuyendo al progreso local a través de la economía sustentable y permitiendo que los jóvenes desarrollen su talento natural aportando con el turismo comunitario, donde ellos mismos y sus familias serán emprendedores” explicó.
Las caletas de Huellelhue y Cóndor, se encuentran en la comuna de Río Negro, dentro de una vasta área de más de 50 mil hectáreas de bosque templado lluvioso, llamada “Mapu Lahual” que significa "Tierra de Alerces". Este lugar posee los últimos bosques costeros no intervenidos del sur de Chile, que no fueron alcanzados por la última gran glaciación ocurrida hace aproximadamente 12.000 años.
Adrián Turner ejecutivo de Darwins Trails, nunca se imaginó visitar en Chile un lugar de estas características. “Las caletas Huellelhue y Cóndor son dos joyas, es difícil de imaginar que exista un lugar así, aislado, en donde la gente local tiene todas las ganas de recibir a los turistas y está siendo capacitada para entenderse con el turismo sustentable. En este sentido la gente de servicio país ha hecho un trabajo increíble logrando este vínculo”, dijo.
“Mapu Lahual” es un emprendimiento de ecoturismo comunitario huilliche que Sernatur apoya por medio de diversas acciones para conectarse con el mercado de turistas responsables, que valoran encontrarse con uno de los últimos ecosistemas marinos libres de contaminación, sitio prioritario para la conservación en Chile y cuyos habitantes, de la etnia huilliche, son los amables anfitriones de los turistas en sus propias casas.