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- La empresa CERMAQ pone término a 530 puestos de trabajo en Quemchi e igual número en Ancud este 1 de febrero 2016
Este 01 de febrero + de 1000 trabajadores perdieron su fuente laboral en las plantas de proceso de Ancud y Quimachi de la empresa nipona CERMAQ (http://www.cermaq.com), despidos que se deben a un ajuste de costo por la baja competitividad del salmón chileno en el mercado internacional.
Para la CONATRASAL esta noticia que afecta 1030 familias de la isla de Chiloé es un aprovechamiento de la industria que miente a sus trabajadores y el gobierno no se hace respetar, hace semanas antes los directivos de la empresa ante consulta de los dirigentes sindicales desmintió cualquier rumor de despido, sin embargo estos llegaron el 01-02-2016 a víspera de la mayor fiesta religiosa de las zonas rurales del archipiélago, la festividad de la VIRGEN DE LA CANDELARIA.
Las mujeres y jóvenes despedidos son de la comuna rural de Quemchi donde se contabilizan 530 despidos, la otras planta de la empresa CERMAQ que despido 500 mujeres y jóvenes trabajadores se ubica en la ribera de la comuna de Ancud.
Para John Hurtado presidente de la CONATRASAL que el 19 de enero estuvo en el seminario donde se habló de la crisis del salmón, para nosotros esto es una traición, el gobierno reacciona lento, con patas de elefantes, ellos apuestan que los trabajadores desvinculados vivan del seguro de cesantía, lo que no es así ya que muchos de estos trabajadores lo hacen por obra y faena, donde el horizonte de trabajo no alcanza a cubrir el seguro de cesantía, señala John Hurtado.
La CUT Llanquihue es más drástica, pedimos la disolución de la mesa del salmón que preside la seremi de economía por incompetencia en el logro del objetivo de evitar cesantía en el sector, lo que se necesita es un gobierno regional ágil, el seremi del trabajo no da el ancho para lo que estamos enfrentando señalan desde la CUT, los empresarios están sacando partido de ello y lo grandes perdedores son los trabajadores despedidos, donde ni siquiera alcanzan a entrar a un plan de capacitación de reinserción laboral.
Lo que el gobierno regional debe gestionar con la subsecretaria del trabajo es un subsidio laboral por 18 meses equivalente al ingreso mínimo para los trabajadores despedido producto de la crisis de la industria del salmón fondo que deben ser canalizados por la OMIL de cada municipio para tener efectividad en la administración del recurso, señalan desde la CUT Llanquihue, que se encuentran reuniendo información y generando la articulación social para contrarrestar los efectos de estos despidos, señalan.
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