28 de Agosto 2009
- Taller fue dictado en Calbuco una de las ciudades pertenecientes al programa de “Comunas Vulnerables” liderado por el Ministerio de Salud. Se entregó material educativo e incluso chalecos salvavidas a cada uno de los participantes.
En la localidad de Calbuco más de 20 pescadores artesanales de diversas caletas de la comuna fueron capacitados en cuidados y protección de rayos UV, y primeros auxilios. El taller fue dictado por profesionales de la Unidad de Salud Ocupacional de la Autoridad Sanitaria Regional, actividad enmarcada en el programa de “Comunas Vulnerables” que desarrolla la institución de salud.
El taller estuvo orientado a un grupo de trabajadores con vulnerabilidad como son los pescadores artesanales, “quienes muchas veces no tienen acceso a ser capacitados sobre los riesgos inminentes de una exposición permanente a los rayos solares UV y los primeros auxilios asociados al salvataje marítimo” dijo la experta en prevención de riesgos de la institución de salud, Angélica Montt.
La profesional agregó que la experiencia de protección de rayos solares, a través de material educativo se realiza en los meses de agosto, periodo en el cual “no existe riesgo de sol evidente; sin embargo, es importante comenzar a sensibilizar y educar sobre esta problemática muchos meses antes para así estar preparados para los meses de verano donde los pescadores artesanales están más expuestos”.
Determinantes en Salud
Paralelamente, la actividad fue inserta en las determinantes sociales en salud, es decir las características sociales externas –como la educación, acceso a vivienda, ingresos- que inciden directamente en el estado de salud de las personas, “por ello es que en la capacitación se pidió el acompañamiento de un familiar directo como sus esposas, ya que esta información es importante para socializarla con sus respectivos núcleos familiares”, explicó Montt.
Cabe señalar que esta es la segunda experiencia de capacitación realizada en esta comuna por el equipo de salud ocupacional, anteriormente desarrollada a través de un taller educativo a 22 buzos junto a sus familiares más directos, todo inserto en la metodología del autocuidado.
