Los animales de compañía están considerados como una medicina preventiva. Su cuidado y el afecto hacia ellos promueven la salud y prolongan la vida. Numerosos estudios han demostrado, por ejemplo, que cuando los acariciamos la tensión arterial se reduce, además de producir efectos relajantes en nuestro organismo. Y es que, sin duda, ellos son un verdadero antídoto contra el estrés y una fuente inagotable de amor y compañía.
En estos tiempos de consumismo desenfrenado, en el que cualquier excusa es válida para el reclamo comercial, se ha tendido a confundir lo material con lo que no lo es. Y muchos de los regalos que entrarán en nuestros hogares, aunque muchos lleguen a confundirlos, no son meros objetos desechables e inertes, sino seres de carne y hueso que sienten y sufren como tú y como yo.
Los animales le darán más de lo que jamás podrías imaginar, pero hay que dedicarles tiempo, dinero y cariño, y hay que ser capaz de sacrificarse por ellos, al igual que ellos lo hacen por ti.
Por desgracia, las protectoras de animales de nuestro país están repletas de preciosos regalos de ojos tristes, que fueron muy deseados en su día, pero exiliados y desechados después a causa de la lacra de la inconsciencia, y que esperan que algún día alguien vaya a buscarlos y se les dé la oportunidad de disfrutar de un nuevo y cálido hogar.
El hecho de pensar en compartir tu vida con un perro es maravilloso, y mucho más si decidimos adoptarlo de un albergue.En primer lugar porque lo sacamos del abandono o del maltrato. Adoptar un perrito de nuestro albergue (en www.albergandounamigo.cl) es una muy buena opciòn.
Atte
Albergando un Amigo
Agrupación Filantrópica de Ayuda a los Animales Abandonados
Cuenta corriente del Bci, 60322438
Puerto Montt.
