2 de abril de 2008.
Diputada UDI Marisol Turres frente a ataques a exportadores de salmón
La parlamentaria planteó la necesidad de proteger las fuentes de trabajo de 50 mil familias que hoy viven de esta industria.
La diputada de la UDI Marisol Turres manifestó su enérgico rechazo al artículo publicado en el periódico estadounidense The New York Times, en el que se acusa al sector de usar hormonas y antibióticos en forma indiscriminada.
“El artículo es impreciso, su información es mala y falta a la verdad cuando sostiene que están ocupando antibióticos para combatir un virus, que se usan hormonas en los peces y que los colorantes empleados en mínimas cantidades tienen consecuencias negativas a la salud humana”, expresó la parlamentaria.
“Hoy la industria salmonera ha ingresando a mercados tan exigentes como el japonés y el europeo gracias a estrictos sistemas de control de calidad y de trazabilidad. Esta actividad cuenta con una fuerte regulación a nivel nacional y a la vez debe cumplir las exigencias de los mercados internacionales, tanto en materia sanitaria como medioambiental y laboral. En innumerables visitas que he realizado a plantas de diversas empresas he podido constatar el alto nivel tecnológico de la industria del salmón en Chile”, agregó.
La diputada de la UDI aseguró que estas falsas acusaciones serán desmentidas con la próxima visita del FDA (Food and Drug Administration), máxima autoridad sanitaria de Estados Unidos, la que llegará a Chile el 20 de abril para realizar muestras en las plantas productoras de salmones.
Acerca del rol del gobierno en este caso, para la parlamentaria es fundamental el informar a la comunidad internacional de la falsedad de lo sostenido en este artículo. “Aquí no sólo esta en juego la imagen de la industria del salmón, si no que también la del propio gobierno como ente regulador”, señaló.
Fuentes de Trabajo
Para la diputada Marisol Turres el argumento más importante para tomar parte en la defensa de la imagen del salmón chileno en el mundo, es la continuidad de las fuentes de trabajo de 50 mil familias que hoy viven de la industria.
“Una problema en el mercado internacional desataría una crisis de desempleo en nuestra zona, con todos los dramas y problemas sociales que ello implica. Cuando una familia pierde su fuente de ingreso se vive una verdadera tragedia”, finalizó.
Luis Américo Toledo
Periodista
Oficina Parlamentaria
Diputada Marisol Turres