- La iniciativa también contempla la inhabilidad de los condenados para desempeñarse en cargos que impliquen contacto con niños.
La parlamentaria UDI Marisol Turres mostró su satisfacción por la aprobación, en la Sala de la Cámara de Diputados, del proyecto que modifica el Código Penal en materia de inhabilidades, incluyendo la imposibilidad de que personas condenadas por delitos sexuales se desempeñen en el ámbito educacional o en los que impliquen, por su naturaleza, un contacto directo y habitual con menores de edad. En el caso de los menores de 14 años, esta inhabilitación es de por vida, mientras que si las víctimas tienen entre 14 y 18 años, la sanción es temporal.
“La aprobación de este proyecto, presentado por el gobierno del presidente Sebastián Piñera, es un hito muy importante, pues busca contribuir con hechos concretos a la seguridad de nuestros niños y adolescentes. Sólo el año pasado se reportaron más de 6 mil delitos sexuales contra menores de edad en nuestro país, lo que demuestra lo urgente que es avanzar hacia una mayor prevención y control de este tipo de delitos”, señaló la diputada Turres.
La parlamentaria gremialista, miembro de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia donde se discutió el proyecto, agregó que también se contempla la inclusión en el Registro General de Condenas de una sección especial con el listado de estas inhabilidades por delitos de connotación sexual cometidos contra menores. “Si se acredita un interés legitimo —por ejemplo, en el caso de un colegio que quiera contratar a alguien— se puede solicitar información al encargado del registro para saber si una persona determinada figura en el listado de inhabilitados. De esta manera se resguarda la seguridad de los niños, pues quien posea una condena por delitos sexuales no podrá desempeñarse en lugares como un establecimiento educacional”, puntualizó la diputada, quien además resaltó que, para evitar distorsiones, el proyecto contempla sanciones para quienes hagan mal uso de esta información.
Turres explicó que “la gravedad del daño que ocasionan los delitos sexuales en la víctima, en su entorno y en la sociedad en general, particularmente cuando se trata de menores de edad, es enorme. Por eso se considera necesario mejorar el sistema de penas con el fin de dar una señal clara a la ciudadanía de que quien haya cometido delitos de esta naturaleza contra menores de 14 años no volverá a tener la oportunidad de acercarse, a través de su profesión u oficio, a niños o adolescentes, minimizando el riesgo de reincidencia”.
“Espero que en el Senado se replique el consenso transversal que logramos en la Cámara, para que estos proyectos se conviertan pronto en ley y para que los jóvenes de nuestro país y sus familias puedan estar más tranquilos acerca de su seguridad, especialmente al interior de sus colegios”, sentenció la diputada Marisol Turres.