A través Proyecto FIC-R 2013 30233424-0, financiado por el Gobierno Regional “Producción de Biogás a través de la co-digestión anaeróbica de residuos orgánicos generados en la Isla Grande de Chiloé”, patrocinado por ESSAL y ejecutado por la Universidad de Los Lagos, se demostró que los residuos de la isla podrían llegar a beneficiar a cerca de 40 mil personas, a partir de su conversión de biogás.
Este combustible es una mezcla gaseosa con un alto contenido de metano (entre un 50% y 75%) dióxido de carbono (entre un 25% y 50%), entre otros. Tiene un poder calorífico mayor a 5.000 kcal/m3N, equivalente al del gas natural, solo que es obtenido a través de la digestión anaeróbica de la materia orgánica.
¿Cómo se realiza la digestión anaeróbica?
Al ser un proceso biológico de fermentación, los residuos orgánicos, como restos de comida, restos de hojas, vegetales, residuos industriales y sanitarios, se degradan por la acción de bacterias anaeróbicas dentro de un tanque hermético llamado Biodigestor donde se mantienen controladas las condiciones de temperatura y pH para la óptima operación del proceso. A partir de éste, se obtiene energía renovable de la fase gaseosa y acondicionador de suelo, de la fase sólida (digestato).
La co-digestión de distintos tipos de residuos, permite eficientar el proceso, aprovechando el complemento entre las diferentes composiciones de los residuos, lo que mejora los rendimientos y reduce los costos de operación.
Sobre los resultados, la directora de este proyecto FIC, Paola Ballerino, señala “se demostró que la obtención de energía renovable a partir de la co-digestión de los residuos que se generan en la Isla es viable. Se debe determinar, de acuerdo a la disponibilidad y las necesidades reales de manejo de los residuos estudiados, la ubicación óptima y estratégica de biodigestores en la Isla. Por de pronto, hemos determinado que un biodigestor de unas 1.500 toneladas de capacidad podría instalarse en la comuna de Castro, y así hacerse cargo del 100% de los lodos de piscicultura que se generan en la Isla y el 100% de los lodos sanitarios de su zona céntrica, siguiendo la proporción másica más favorable de estos residuos, determinada en nuestros procesos de co-digestión. Con esto, se podrían generar unos 150.000 m3 de biogás en el año con un 72% de concentración de metano.”
En tanto, el jefe del Departamento de Medio Ambiente de ESSAL, Marcelo Cofré señaló: “El biogás además de usarse como fuente de energía, transforma el concepto de residuo, dejando de ser un problema sino por el contrario, un beneficio como por ejemplo fertilizante en la agricultura verlo como un. nos trajo aprendizaje para contribuir a esta asociatividad con la universidad.