Señor Director:
Con molestia, los alcaldes, al igual que todo el país, hemos visto cómo nuestros parlamentarios se autoasignaron permiso para sus campañas. La indignación no radica en que pidan permiso, sino que el tiempo no trabajado sea remunerado. Esta actitud contrasta abiertamente con la norma que ellos mismos aprobaron para los alcaldes, quienes en tiempo de elecciones deben pedir permiso sin goce de sueldo para hacer sus campañas, no pudiendo utilizar ningún recurso fiscal durante ese período (secretaria, teléfono o vehículo). Y por cierto, contrasta con los millones de trabajadores chilenos que jamás recibirían un sueldo sin trabajar.
Medidas como ésta enlodan y desprestigian la ya deteriorada imagen del Congreso Nacional, institución fundamental para el buen funcionamiento de la democracia. Si a esto le sumamos la polémica por el bono de bencina de hace un tiempo y la investigación (periodística y judicial) por las asignaciones parlamentarias, el espectáculo deja mucho que desear.
Sabemos de los esfuerzos de muchos parlamentarios por mejorar la imagen de la Cámara de Diputados (especialmente de sus últimos tres presidentes), y apoyamos con entusiasmo las medidas adoptadas en esa línea. Sin embargo, para los alcaldes esta última polémica sobre el período para hacer campaña nos parece simplemente impresentable.
Por todo lo anterior, hacemos un llamado a los diputados de todas las bancadas a dejar sin efecto esta vergonzosa medida, que enloda no sólo a la Cámara de Diputados, sino a nuestra desprestigiada política como un todo.
Claudio Orrego (DC)
Alcalde de Peñalolén
José Manuel Ossandón (RN)
Alcalde de Puente Alto
Pablo Zalaquett (UDI)
Alcalde de Santiago
Rabindranath Quinteros (PS)
Alcalde de Puerto Montt
Sergio Echeverría (PPD)
Alcalde de San Joaquín