- Los Fiscales de la Cofradía de los Fiscales San Juan Bautista de Calbuco y Los Arrieros Cordilleranos de Paso El León de Cochamó recibieron premio y reconocimiento en ceremonia encabezada por Roberto Ampuero, Ministro de Cultura.
- El programa Tesoros Humanos Vivos del Consejo de Cultura ha recibido un total 596 postulaciones, condecorando a 26 comunidades y personas portadores de tradición y que corren serio peligro de desaparecer.
Al respecto, al Secretario de Estado destacó la iniciativa que reconoce y resguarda tradiciones en peligro de desaparecer y dirigió especialmente sus palabras a los 6 reconocidos: “Los chilenos somos muy afortunados. Porque a través de ustedes, los Tesoros Humanos Vivos 2013, podemos conocer y apreciar expresiones artísticas, folclóricas, culturales, religiosas o costumbristas que conforman la riqueza de nuestro patrimonio inmaterial. Ese patrimonio, de valor infinito, es el que queremos cuidar, preservar y transmitir”, destacó.
Tres individuos y tres comunidades fueron las distinguidas en la 5ta versión del Programa que se implementa en distintos países del mundo, como China, México, Francia y República Checa, entre otras, siendo Chile el único país sudamericano que lo ejecuta.
Tesoros Humanos Vivos de la Región de Los Lagos
De los reconocidos, dos agrupaciones pertenecen a la Región de Los Lagos. Una de ellas es, la Cofradía de Fiscales San Juan Bautista de Calbuco, formada por 34 fiscales, que en su rol comunitario, son considerados autoridades de cada pueblo y guía espiritual en la zona del archipiélago de Chiloé (desde el siglo XVII), además de responsables de coordinar y organizar actividades como procesiones y velorios.
“Nunca nos imaginamos que llegaría este importante reconocimiento. Pero, bueno, nosotros trabajamos y fue Dios quien nos envió este regalo”, afirmó José Mateo Huenante, fiscal a cargo de la capilla de Caicaén, durante la ceremonia de premiación.
También, los Arrieros Cordilleranos de Paso El León de Cochamó, quienes son uno de los pocos grupos que continúan desarrollando la actividad del movilizar el ganado cruzando la cordillera, y cuyo reconocimiento realza una labor que aún perdura a lo largo de Chile.
“Es la primera vez, desde que existe este programa, que en nuestra región es reconocido un Tesoro Humano Vivo. Nos sentimos tremendamente orgullosos de este reconocimiento. Tanto los fiscales de Calbuco como los arrieros de Cochamó, no solo son portadores de tradiciones importantes, sino que además, cumplen un rol fundamental en su comunidad y son valorados y queridos por ellos”, destacó Alejandro Bernales, director regional del Consejo de la Cultura y las Artes de Los Lagos.
En esta quinta versión del programa creado por Unesco e implementado por el Consejo de la Cultura en Chile, se entregaron 3 millones de pesos a cada individuo, y 7 millones a cada comunidad, consolidándose como la más importante distinción en el ámbito del patrimonio cultural inmaterial, reconociendo la trayectoria de cada uno de los Tesoros Humanos Vivos y su entrega desinteresada hacia la comunidad.