Como de costumbre cada 8M es un llamado profundo a la reflexión sobre los contextos de violencia en que las mujeres hemos vivido y sobre las brechas y desigualdades de género con las que nos desarrollamos. Es así como hablar de autonomía económica es clave, especialmente en las realidades de mayor postergación y vulnerabilidad.
De acuerdo a las estadísticas del INE, en Chile las mujeres ganan un 22% menos que los hombres por hora trabajada y sólo un 43% de las mujeres son parte de la fuerza laboral del país a diferencia de los hombres con un 64%. La realidad es más dramática si hablamos de las tareas de cuidado, los estudios cuantifican el promedio de labores no remuneradas por semana de las mujeres en 41,25 horas. Mientras que en el caso de los hombres desciende a 19,17 horas/semana.
Es evidente que conquistar la autonomía económica para las mujeres supone la superación de brechas significativas en términos de igualdad salarial, el acceso a la educación, la multiplicidad de roles por las tareas de cuidado, la desigualdad territorial y la discriminación son obstáculos que no pueden sortear las mujeres en soledad. Es una responsabilidad social y un deber del Estado.
Por eso no da lo mismo quien gobierne y eso lo hemos visto concretamente durante estos años. La ley de responsabilidad parental (papito corazón), el registro nacional de deudores; la ley de conciliación de la vida laboral, familiar y personal, la reforma de pensiones que beneficia a más de 1 millón de mujeres, los programas de riego para mujeres campesinas y el programa de apoyos y cuidados ya instalado en 11 comunas de la región son políticas de estado que alivianan la carga que muchas mujeres llevan a cuestas y contribuyen en la conquista de su autonomía.
Este 8M es una invitación a seguir construyendo entre todas y todos un estado que norme, regule y crezca sin dejar a nadie atrás. Los avances logrados a la fecha son el fruto de muchas generaciones de mujeres que han empujado estos cambios y no podemos frenar los avances aquí. Como Estado aún nos quedan muchos más logros por alcanzar.