A través de un proyecto financiado por la Seremia de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la región de Los Lagos y su programa de Fortalecimiento de la Identidad Cultural Regional, la Municipalidad de Llanquihue desarrolló el proyecto "Taller de Cestería y Encuentro de Palín”, cuyo objetivo fue rescatar y poner en valor la identidad cultural, fortaleciendo las tradiciones ancestrales en los sectores más apartados de esa comuna.
Acompañó la ceremonia de cierre del Taller, la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Cristina Añasco junto al Alcalde de Llanquihue, Víctor Angulo. En la ocasión la autoridad regional señaló que “nuestro Ministerio tiene una línea de trabajo que es Ciudadanía, donde trabajamos con el fortalecimiento de la Identidad Cultural Regional y es un trabajo con los municipios y las oficinas de cultura si es que existen, para entregar herramientas de continuidad de saberes ancestrales, en este caso se está finalizando un Taller de Cestería muy importante para la comunidad donde mujeres y niños/as pudieron aprender o reaprender este oficio que es ancestral, que lo entregó una maestra de Llanquihue y que obviamente nos tiene muy contentos, porque lo que queremos es apoyar el trabajo de los artesanos/as y cultores de la región pero que ellos también puedan entregar su sabiduría y su aprendizajes a la comunidad en general, tanto para fortalecer esta identidad que en algún momento fue negada, pero también, para entregar herramientas para mejorar la economía de las familias que es tan necesario”.
A su vez el Alcalde de Llanquihue, Víctor Angulo destacó la participación de 15 mujeres de zonas rurales y comentó que “quiero dar las gracias al Ministerio de Las Culturas, por haber apoyado con el financiamiento de este Taller de Cestería donde tuvieron la posibilidad de poder participar, poder conocer y aprender alrededor de 15 personas y hoy culmina con la exposición de sus trabajos. Muy contentos, por la participación y dedicación en el tiempo, felicitar la participación de cada uno, también agradecer a la monitora, Carolina, que hizo un trabajo extraordinario y que Dios quiera que esto pueda servir para cada una de ellas y un niño de 12 años que participó en su economía familiar”.
En tanto, la monitora que guió el Taller fue Carolina Valenzuela, quien comentó que “este taller duró 15 horas, ellas realizaron 2 trabajos en dos técnicas distintas, una que es el costurado y ralo, son dos trabajos muy diferentes, pero existen otras formas de tejido y de fibras vegetales, en este caso trabajamos con la manila o también conocida como pita. Quedé super contenta después de terminado el taller, hay frustración cuando uno comienza porque no sabe, porque es algo nuevo, en la zona sur hay mucha gente que tejía cestería y que se ha perdido con el tiempo, que trabajaban el junquillo, la totora y si conversas con gente antigua de la zona ellas tienen memoria de que sus abuelos o sus papás tejían cestería, para mi es volver a la memoria de ellas y su gente”.
Una de las participantes fue Gabriela Morales quien agregó que “me llamo mucho la atención, me gusta mucho hacer uno mismo las cosas, además que era un desafío para mi hacerlo desde el inicio, sacarlo desde las plantas y todo el proceso, es algo que, recomiendo, que uno mismo haga las cosas y aparte de decorar, uno puede generar ingresos”.