- Los canes sí cursan cuadros respiratorios con síntomas similares a los de los humanos. No someterlos al frío por mucho tiempo ayuda a evitarlos, siempre considerando que, dependiendo de la raza, varía su capacidad de regular la temperatura corporal.
Antonio Bizama, académico de Medicina Veterinaria de la Universidad San Sebastián y director del programa de Magister en Clínica de Pequeños Animales, explica que, si bien, no se denomina resfrío; los perros sí cursan cuadros respiratorios en las vías aéreas altas, con secreción nasal, congestión y tos. Son contagiosos entre ellos, pero no se transmiten a los humanos. Tampoco los virus que afectan a las personas contagian a las mascotas.
¿Podemos vacunar a los perros para prevenir estos cuadros?
Existen vacunas polivalentes que previenen enfermedades como el adenovirus tipo 2 y la parainfluenza, virus que producen cuadros respiratorios en las vías aéreas altas. Se administran de manera anual y, a su vez, protegen de patologías como el distemper.
Existen otras complementarias, como la vacuna KC, que actúa contra la traqueobronquitis, que se caracteriza por la irritación de la mucosa de la tráquea y del tracto respiratorio superior, causando una tos intensa y persistente. La traqueobronquitis es altamente contagiosa entre canes, por eso se le ha denominado coloquialmente como tos de las perreras.
¿Pueden complementarse las vacunas con vitaminas?
No existen vitaminas o minerales que prevengan enfermedades respiratorias altas salvo una buena alimentación; mantener desparasitados a los animales; y no exponerlos a demasiado frío, ya que esto favorecen la presentación de este tipo de patologías.
¿Hay razas a las que les cueste más regular su temperatura?
Sí existen diferencias entre razas. Aquellas de pelaje largo, como un siberiano o San Bernardo, están adaptados para el frío y no tienen complicaciones estando cerca de los 0°C. Distinto es para los de pelaje corto, como los bulldogs y boxer, que no deberían ser sometidos a menos de 7°C.
Considerando que los perros calientan el aire que inspiran a través de la cavidad nasal, los braquiocefálicos (de hocico corto), como los pug, son menos eficientes a la hora de ganar calor. Otro grupo de especial atención son los de mayor edad o con enfermedades crónicas graves como cáncer, problemas articulares o cardiacos; pues sus mecanismos de control de temperatura son menos eficientes. Ellos no deberían ser expuesto a bajas temperaturas, ya que un cuadro respiratorio podría tener otras consecuencias o complicar su enfermedad de base.
¿Cómo protegerlos del frío?
Cuando un animal está sometido a un exceso de temperatura se activan mecanismos de pérdida de calor, por eso es perjudicial sacarlo bruscamente a un ambiente helado. Lo ideal es que no permanezcan en lugares muy fríos por más de 30 minutos, por lo que es importante priorizar paseos cortos y evitar la hora en que se registren las mínimas. Si es posible, una alternativa es usar una capa o zapatos para abrigarlos, sin olvidar que el control de la temperatura es por vía aérea.
¿Es recomendable suspender los paseos?
En días con demasiado frío lo recomendable es limitar el tiempo de exposición. Dependiendo de la raza y sus necesidades de aire libre y espacio, si se acortan los paseos se sugiere suplir esta diferencia enriqueciendo el medio con juguetes y tener actividades dentro de la casa. También es importante que no se sometan a excesiva calefacción. ¿Cómo saber cuál es el punto óptimo? Los perros van regulando su temperatura alejándose o acercándose a las fuentes de calor.