Con éxito de ventas culminó la octava versión de Volver a Tejer “Grandes Maestras”, proyecto social y comercial de INDAP, Tiendas Paris y Fundación Ona que promueve el rescate textil y la creación de productos con valor cultural y que este año llegó al mercado nacional con más de 1.000 packs de tres ovillos de lana de oveja criolla de 100 gramos hilados en huso y rueca por 120 artesanas de Santo Domingo a Palena.
Con motivo de la pandemia, la iniciativa invitó al público a confeccionar artículos de vestuario en el hogar con materia prima producida en los predios de las propias artesanas, las que pertenecen a la Agrupación Santo Vellón, de la Región de Valparaíso; las cooperativas Valle de Oro y Tejiendo Sueños, de O´Higgins; la Agrupación Lanin Kuwu y Nieves Calcumil, de Los Ríos, y las agrupaciones Lanas Alto Palena e Hilanderas de Tenaún, de Los Lagos.
La novedad de este año fueron tres videos tutoriales –que solo en YouTube sumaron más de 10 mil reproducciones– en los que las artesanas Tránsita Neculfilo Huisca, de Panguipulli, Sello Artesanía Indígena 2019; Laura Ramos Leiva, de Molina, Sello de Excelencia 2011 y Premio Unesco 2012, y Albina Choque Challapa, de Colchane, Sello de Excelencia 2014, enseñaron con diversas técnicas el proceso para crear una bufanda en telar mapuche, un zorro culpeo y un gorro malku.
El cierre de campaña se realizó con una ceremonia vía streaming que fue transmitida por las redes sociales de INDAP y que contó con la participación del director nacional de la institución, Carlos Recondo; la gerente de Sostenibilidad Paris, Fernanda Kleuver; la directora ejecutiva de Fundación Ona, Macarena Peña, y la maestra artesana Tránsita Neculfilo.
En el encuentro online se exhibió un saludo de la ministra de las Artes, las Culturas y el Patrimonio, Consuelo Valdés, quien destacó que las maestras que realizaron los tutoriales “representan no solo la diversidad de la tejeduría tradicional, sino también el talento y la creación de mujeres rurales que han dedicado su vida a esta labor, mostrando técnicas tradicionales a las nuevas generaciones”.
También enviaron un saludo las artesanas Susana Abarca y Alejandra Ávila, de la Agrupación Santo Vellón, y Susana Fernández, de la Agrupación Lanas Alto Palena, quienes agradecieron a INDAP por la oportunidad que les dio para aprender nuevas técnicas y mantener vivo el legado textil de los territorios rurales de nuestro país.
Fernanda Kleuver, gerente de Sostenibilidad Paris, contó que este año los packs de hilados se vendieron en 48 horas y debieron reponer stock, lo que refleja el éxito de la política de consumo responsable que están impulsando y la mayor valoración que existe por los productos nacionales, “razón por la cual iremos por una novena versión en 2022”.
Para el director nacional de INDAP, Carlos Recondo, esta alianza es una experiencia enriquecedora para la institución, ya que nos muestra el camino que debe seguir la Agricultura Familiar Campesina para llegar a los mercados, “poniendo en valor oficio, tradición y cultura”.
Según Macarena Peña, de Fundación Ona, uno de los desafíos que planteó la pandemia fue subirse al tema online, lo que se hizo a través de los tutoriales, que “permitieron resaltar el saber-hacer del oficio textil, llegando al público con distintas técnicas patrimoniales”.
Tránsita Neculfilo, de la comunidad Juan Necul Milleuco de Panguipulli, contó que adquirió el oficio por herencia familiar y que sus primeros trabajos fueron unos atuendos para su padre, a los 12 años. Añadió que la experiencia de participar en Volver a Tejer ha sido un regalo y un motivo de orgullo para quienes la conocieron haciendo dedo en la zona rural donde vive -que hace 9 años no contaba con locomoción- y hoy la vieron en un comercial de televisión.
La artesana también comentó que para la confección de una prenda se enfoca en la persona que la va a usar y en lo que va a sentir, tratando de crear una “burbuja de felicidad”, y dijo que ahora que le han pedido piezas desde algunos museos está “tratando de hacerlas perfectas, para que duren mucho tiempo”. Según Tránsita, estas cualidades son muy necesarias en el mundo que vivimos. “Hoy necesitamos más que nunca abrazar con el alma y confiar”, expresó.