Este año, SAMU Reloncaví proyecta para este feriado largo un aumento del 5% aproximadamente en las llamadas al 131, las que en pandemia se empinan a un promedio de 700 diarias, alcanzando las 21.000 mensuales. Pre pandemia se recibían una media de 560 llamadas al día y 17.000 al mes.
El Encargado de Emergencias y Desastres del Servicio de Salud, Dr. Daniel Hernández, explica que “el plan consiste en tener de manera anticipada la previsión, tanto de los equipos que estarán trabajando para estas fiestas, que incluye a los equipos clínicos pero también a los directivos que estarán de turno. Esto permite garantizar la continuidad de la atención para los usuarios, tanto en los pacientes hospitalizados como para los servicios de urgencia de toda la red, que van desde los SAPUs hasta el Hospital Puerto Montt, incluido SAMU Reloncaví”.
Agrega que el plan también “considera la logística para asegurar el funcionamiento, garantizando que se dispone de los insumos necesarios y además con los soportes de líneas vitales operativos en cuanto a disponibilidad de grupos electrógenos, reservas de combustible, agua potable, electricidad, sistema de comunicaciones, móviles disponibles, disponibilidad de camas, gases clínicos y servicios de apoyo. En conjunto esto permite además frente a una emergencia poder contar con autonomía suficiente para no suspender las atenciones”.
El jefe de SAMU Reloncaví, Dr. Carlos Salazar, explicó que en esta fecha se observa “un aumento de consultas por agresiones, caídas a nivel, intoxicaciones ligadas a alcohol, también conducción bajo los efectos de alcohol. Después de las fiestas aparecen consultas por molestias abdominales por transgresiones alimentarias.
Solicitó “hacer un uso cuidadoso del 131 y de ambulancias, hay que recordar que los sistemas hospitalario y de rescate han estado profundamente exigidos durante este año por la pandemia, gran parte del trabajo de prevención es de la misma población”.
