Cómo un acto «irresponsable» calificó el vicepresidente del Senado el oficio del gobierno que llama a los trabajadores públicos a retomar sus actividades laborales de manera presencial a partir de este lunes.
El parlamentario insistió en que llamar a recuperar la normalidad sin contar con fundamentos técnicos es un error “y todavía peor es que la autoridad deje a los dueños de mall la facultad de decidir cuándo y en qué condiciones reabrir los centros comerciales”.
Quinteros remarcó que “hoy no es el momento de abrir el comercio o los colegios o que los trabajadores retomen sus actividades de manera normal. El mismo gobierno ha señalado que el peak de contagios sería entre las semanas 8 y 12, el ministro y el presidente hasta un par días atrás insistían en que todavía no viene lo peor, pero hoy caen en una contradicción absoluta y ponen en riesgo la salud de trabajadores y sus familias”.
Agregó que, en el caso de los trabajadores públicos, quienes realizan labores esenciales están trabajando en modalidad de turno para garantizar el acceso a esos servicios.
“Los funcionarios siempre estarán dispuestos a cumplir su función pública que hoy es más necesaria que nunca, pero es legítimo que exijan todas las condiciones sanitarias para el retorno al trabajo” señaló.
El vicepresidente del Senado aseveró que “el gobierno no puede seguir tomando decisiones en esta especie de oscurantismo” y aseguró que, sin participación plena de expertos y sin total transparencia en la información, “el Gobierno no logrará adhesión de la ciudadanía a las medidas sanitarias que impulse y tampoco tendrá credibilidad si renuncia a ejercer sus atribuciones y depende de la buena voluntad de los empresarios
En ese sentido dijo que es muy “delicado” que el gobierno tome decisiones a espaldas de los trabajadores y que no existan los protocolos sanitarios necesarios.
“Una cosa es que la Cámara de comercio quiera anteponer la actividad económica a la vida de las personas y otra muy distinta que el Ejecutivo siga esa línea. No lo vamos a permitir, aquí la prioridad es salvar vidas, no la economía porque los números se recuperan, pero la vida de las personas no”, declaró.
“La emergencia sanitaria exige unidad de acción para enfrentarla, pero el Gobierno prefiere seguir camino solitario, sin expertos y sin diálogo”, concluyó Quinteros.