- En el contexto del convenio de colaboración entre la casa de estudios y el municipio, firmado recientemente, la Sede universitaria se vincula a través de este mecanismo de preservación del patrimonio natural y cultural.
Durante el encuentro, se realizó un avistamiento de la diversidad de aves y existió un provechoso diálogo en torno al plan de manejo que el municipio está desarrollando para la Isla con el objetivo de garantizar la protección de las especies y el entorno natural, mediante un desarrollo sostenible. El equipo técnico de la UACh Sede Puerto Montt, estuvo conformado por Valentina Reyes (Directora de Vinculación con el Medio), Marisel Santana (Coordinadora de Vinculación con el Medio ), Ignacio Chávez (Ejecutivo de Dirección de investigación), Juan Giraldo (Docente Instituto Acuicultura, Escuela de Ingeniería Ambiental), Javier Muñoz (Docente Trabajo Social), Diego Reyes (Director Escuela de Ingeniería Ambiental), Gabriela Quintana (Periodista), Andrea González (Directora Escuela de Arqueología) y Alejandra Cantin (Directora Escuela de Trabajo Social).
Valentina Reyes Rebolledo, Directora de Vinculación con el Medio de la Universidad Austral de Chile Sede Puerto Montt, agradeció la invitación del municipio a la casa de estudios para sumarse en este proceso de desarrollo del plan de manejo del santuario y señaló que "organizamos un equipo técnico para visitar hoy la isla Lagartija y ver en qué ámbitos podemos empezar nosotros a involucrarnos de mejor manera en el plan de manejo que está desarrollando hoy la Municipalidad de Calbuco en la Isla. Desde la Dirección de Vinculación con el Medio, nuestra intención es generar estrategias de trabajo que vinculen a nuestros docentes, investigadores y estudiantes para empezar a experimentar nuestro proyecto universitario en el territorio". La Directora además reiteró que "esta es una de las tantas iniciativas que estamos desarrollando hoy con la municipalidad de Calbuco", todo esto a raíz del convenio de colaboración firmado en octubre de 2022. Tras esta visita Valentina Reyes entregó un balance positivo de los avances que se están viendo reflejados luego del acuerdo entre ambas instituciones: "estamos muy contentos con todas las acciones que estamos empezando a desarrollar y el hecho que el municipio nos haya interpelado como universidad para poder trabajar con ellos".
Ernesto Fanta, Coordinador del Plan de Manejo de la Isla Lagartija, explicó el itinerario y motivos de la vista al lugar "hoy dimos una vuelta a la isla en una embarcación desde donde pudimos ver la fauna marina como las aves y pingüinos, ver las amenazas que atacan a esta isla y explicar cómo este plan de manejo está configurado para que, con la participación ciudadana a través de las organizaciones que están en esta zona, puedan ser parte de este plan para el desarrollo de esta isla y se pueda mantener como santuario". Las principales amenazas identificadas son el estar a menos de 4 km de un puerto industrial, malas prácticas pesqueras, acciones no autorizadas de turismo informal, ser afectada por la contaminación de las actividades acuícolas, acciones de especies exóticas invasivas y temas de mal manejo subacuático.
Respecto al diálogo logrado durante esta visita, Ernesto Fanta destacó: "esta reunión con la Universidad Austral fue bien interesante ya que revisamos el convenio que tenemos y empezamos a dar marcha blanca a todas las actividades que desarrollaremos durante el año para poder ir trabajando en virtud del plan de manejo". En los próximos días comenzarán a realizarse mesas de trabajo en diferentes ámbitos donde la Universidad, a través de sus especialistas, estará presente.
Importancia patrimonial y arqueológica de la isla Kaikue-Lagartija
La isla fue es nombrada en base a una fusión de palabras; el nombre "Kaikué" proviene del Chezungun (lengua Huilliche) y significa "Islade los pájaros", lo cual demuestra cómo históricamente la isla es un espacio de reproducción, refugio y alimentación de las avesque la habitan, existiendo a la fecha el registro de 24 especies que la utilizanespecialmente como sitio de descanso; además de otras especies como la lagartija picta (Liolaemus picta), cuyo nombre también lleva la isla, además de su parecido al cuerpo de una lagartija cuando hay marea baja.
La importancia sociocultural de esta isla radica en el uso humano sobre los recursos marinos, la cual se remonta desde la época de los pueblos originarios, quienes desarrollaron un sistema de extracción tradicional de mariscos, algas y otros. En este punto se sustenta su valor arqueológico, ya que en ella existen corrales de pesca y conchales; los primeros corresponden a construcciones abandonadas de murallas de piedra que permitieron desarrollar a las comunidades locales sistemas sociales de extracción de recursos marinos que en la actualidad permiten el estudio sociocultural e histórico de la isla. A este registro arqueológico se suma la existencia de un conchal, como sitio de interés histórico que permite conocer parte de la forma de vida de los grupos humanos que vivieron en la zona hace miles de años.
Esta isla está rodeada de sectores bajos, y como consecuencia de ello se han producido naufragios accidentales, como el del Vapor Valparaíso hace 150 años. En el 2022 investigadores chilenos del Núcleo Milenio Océano, Patrimonio y Cultural (OHC) donde participan arqueólogos UACh, dieron a conocer la relocalización y documentación de los restos del vapor británico «Valparaíso» en las inmediaciones del actual Santuario de la Naturaleza isla Kaikué/Lagartija, golfo de Ancud.
En este maritorio nidifica también un importante número y variedad de aves marinas-costeras, una de las más representativas es el Pingüino de Magallanes, además desde 2021 se ha evidenciado la presencia de los primeros pingüinos de Humboldt (Spheniscus humboldti), a los cuales es posible observar en la playa del Santuario junto a sus volantones a fines del 2020, LABECOL (2021). Así mismo, destaca la presencia de otras especies como el Delfín Austral (Lagenorhynchus australis). Esta isla constituye en su conjunto un ecosistema muy importante en la cadena trófica con una biodiversidad importante de invertebrados marinos de consumo humano como erizos, almejas, ostras, entre otros.