Este 19 de diciembre iba a ser el Día Mundial del Transporte. Sin embargo, la propuesta no prosperó, cambiándose este 2023 definitivamente al 26 de noviembre, declarado por la Asamblea General de la ONU como el Día Mundial del Transporte Sostenible, reconociendo la importante función que desempeñan los sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos en el apoyo al crecimiento económico sostenible, la mejora del bienestar social de las personas y el fomento de la cooperación internacional y del comercio entre los países.
¿Y cómo va la cosa en Chile, y en específico, en nuestra región?
Hace un año envié una carta similar a este y varios medios de comunicación regionales, con la misma pregunta, y haciendo ver un poco de la notable crisis de transporte público que vive nuestra región.
Hoy todo sigue igual o ha empeorado: el casco histórico y la zona rural de Puerto Montt sigue sin tener transporte público mayor; en Puerto Varas, Llanquihue y Frutillar, continúa un monopolio de colectivos que no cumplen siempre sus recorridos, suben y suben sus pasajes sin pensar en los usuarios, y que además, se oponen a proyectos de cambio como el sistema de electromovilidad que propone la Municipalidad de Puerto Varas; en Fresia, Los Muermos y Maullín, gustarían de contar con esta problemática, puesto que ni colectivos tienen, y deben pagar los altos costos que implica poder movilizarse solamente en taxi. A nivel intercomunal hemos derechamente empeorado, significando aproximadamente $6.000 diarios el movilizarse desde las comunas aledañas hasta Puerto Montt, lo que contrasta profundamente con el límite máximo mensual de tarifa de $38.000 que tiene el Gran Santiago desde hace unos meses. En nuestras islas y cordillera, más de lo mismo, con las comunidades de Isla Puluqui y Llanada Grande, constantemente peleando contra una pared y no obteniendo nunca mejoras y avances en cuanto los múltiples problemas que tienen con las barcazas subsidiadas que operan en Calbuco y el Lago Tagua Tagua en Cochamó.
Y así podríamos seguir, pero la carta no me da para seguir retratando esta tremenda crisis que podría llenar un libro, la cuál se expresa en pocas palabras, en altos valores de pasajes, bajas frecuencias, nula mantención de máquinas, falta de accesibilidad universal, malos tratos, no respeto de beneficios tarifarios de adulto mayor y estudiantes, sectores sin movilización, descoordinación entre un servicio y otro, falta de planificación en la inversión pública relacionada a transporte, y más.
Nuestro país está en deuda con las regiones, sigue en deuda, poco se ha trabajado por solucionar este tema en regiones y la comunidad lo sabe. Pero esta vez hay una diferencia, porque con orgullo puedo decir que en la pasada carta hice un llamado a quienes se sientan igual de pasados de llevar con esta crisis y a luchar por esto cambie, y así fue: Durante este 2023 formamos la Agrupación de usuarios del transporte público de la Provincia de Llanquihue, la que actualmente cuenta con aproximadamente 50 socios de Puerto Varas, Puerto Montt, Frutillar, Llanquihue, Fresia y Cochamó; los que ya estamos visibilizando las problemáticas de cada comunidad, y a la vez, estamos trabajando en una propuesta para cambiar esto de una vez por todas. La vez pasada, llamé a unirse y pelear por esto, pero esta vez, llamamos.
Jordi Valenzuela Muñoz
Presidente de la Agrupación de usuarios del transporte público de la Provincia de Llanquihue
