- Institución ha sido clave en el nacimiento de más de 7 mil 400 niños en el país, gracias a un programa de acompañamiento integral a mujeres con embarazos vulnerables.
El anterior testimonio es de Javiera, y es uno de los tantos que han permitido a cientos de mujeres en Chile dar a luz a un bebé, cuyo destino podría haber acabado con su vida de no haber encontrado el apoyo necesario en gestación. Experiencias como ésta fueron compartidas en la ceremonia de Premio Aurora que entrega la Universidad San Sebastián a personas e instituciones que se han destacado por la defensa de la vida desde la concepción.
En la oportunidad, Fundación Chile Unido fue galardonada con este reconocimiento. “Estamos muy contentos como fundación de haber recibido el Premio Aurora. Aurora es un reconocimiento al valor de la importancia de la vida humana. Avanzar en esta dirección es lo que Fundación Chile Unido ha estado promoviendo desde hace 24 años”, destacó Verónica Hoffmann, directora ejecutiva de la institución.
Hoffmann agregó que “las mujeres que hemos podido apoyar, en medio de un embarazo de complejidad y vulnerabilidad, hoy son madres que enfrentan la vida desde otra perspectiva. Es más, cerca del 77% que son parte de nuestro programa de acompañamiento, continua su embarazo. Eso ha significado que más de 7 mil 400 niños hayan venido al mundo y hoy son parte de nuestra sociedad”.
Para el vicerrector de la sede De la Patagonia, Sergio Hermosilla, la entrega de Aurora es un justo reconocimiento a esta fundación. “De no ser por la acción decidida de Fundación Chile Unido de apoyar a mujeres -y también a sus familias- mucho de los niños, algunos de ellos hoy adolescentes y jóvenes, no habrían podido nacer”.
“Para nosotros, como carrera, significa mucho entregar este reconocimiento, porque dialoga profundamente con el trabajo y la vocación de servicio que tenemos con la vida”, expresó Thiare Brito, presidenta del Centro de Estudiantes de la carrera de Obstetricia.
Aurora es un reconocimiento que nace con la historia de la socióloga Bernarda Gallardo, quien en 2003 inicia una lucha legal para adoptar a una recién nacida fallecida en un vertedero. Esto, con el fin de convertirla en su hija y darle digna sepultura. A ella le llamó Aurora. Sin embargo, no fue la única. Con el tiempo, encontraron cuatro niños fallecidos en similares circunstancias. A todos ellos logró adoptarlos. Para todos ellos logró también una digna despedida. Así se convierte en una férrea defensora de la vida e incluso inspiró la película chilena, “Aurora”.