15 y 17 horas
No sólo aventuras y entretenidas historias, sino que con un claro mensaje acerca del valor de la lectura, es la serie de montajes que trae la obra de teatro infantil “Te lo cuento” que exhibe la Compañía ¿Dequeterríes? Teatro, este viernes y sábado, con funciones a las 15 y 17 horas, en la Casa del Arte Diego Rivera, presentaciones que tienen un valor de $2 mil pesos.
Con el apoyo de la Corporación Cultural, el show para niños (y adultos) cumple uno de los objetivos de la institución que es fomentar el acercamiento a bienes culturales entre los más pequeños, de tal manera de ir construyendo futuras audiencias.
LAS HISTORIAS DE “TE LO CUENTO”
“El rey es mocho”
En un pueblo había un reino donde vivía un rey, que tenía un enorme secreto. Según él nadie lo sabía, excepto una persona que era su peluquero, de quien pronto se enteró que estaba muy enfermo, muriendo al poco tiempo. El rey se entristeció mucho pues ese hombre era muy importante para él. El rey estuvo días, semanas y meses encerrado en el castillo sin cortarse el cabello y ya empezaba a notarse que usaba una peluca muy vieja, mientras el cabello le salía de la peluca. Al final, muy preocupado, se llenó de valor y decidió buscar un nuevo peluquero
“El peinado de la Tía Chofi”
Narra la historia de una señora muy preocupada de su apariencia, pero un tanto seria y refunfuñona. A ella le encantan las fiestas y cada vez que la invitan a alguna celebración hace preparativos para acicalarse en el salón de belleza. En cuestión de horas su cabello escaso se convierte en una obra de arte muy elaborado.
Un día en que la invitan a una boda, pero de camino sucedió un imprevisto: un animalito extraño se apoderó de su peinado con graves consecuencias para la Tía Chofi.
“Miedo”
Había una vez un chico que tenía miedo. Esta historia es para los chicos que tienen miedo. Y para los que alguna vez tuvieron miedo y ahora se volvieron valientes.
“El nacimiento del Caleuche”
Es un cuento dramatizado que interpreta algunas visiones respecto a la creación del mito chilote, situando su origen en los navíos mercantes y piratas de origen holandés que habrían navegado estas aguas entre los siglos XVI y XVII.