jueves, diciembre 02, 2010

Desde angelmó llamaron al consumo seguro de mariscos


2 de Diciembre 2010

Desde el Mercado Típico Angelmó la seremi de Salud, Mónica Winkler junto al gobernador Provincial, Francisco Muñoz hicieron un llamado a la población a consumir mariscos cocidos y así evitar las complicaciones de salud derivadas del Vibrio parahemolítico, al inicio de la temporada estival.

Es por ello que junto a un equipo de inspectores del Departamento de Salud Ambiental, encabezaron una fiscalización para verificar aspectos como la cadena de frío y la temperatura de los mariscos, “al inicio de la temporada estival nosotros reforzamos nuestras acciones preventivas, pues nos interesa asegurar que el consumo de los mariscos sea seguro y evitar las intoxicaciones por Vibrio parahemolítico”, expresó la seremi de Salud, Mónica Winkler.

Winkler agregó que se trató de una fiscalización para verificar la trazabilidad (el origen de los mariscos), la temperatura y el estado de los mariscos, enfatizando en el llamado a la población a “consumir sólo mariscos cocidos por 5 minutos, que también no exista contaminación cruzadas, vale decir que los mariscos crudos no se mezclen con los cocidos, además de una correcta refrigeración de éstos”, expresó.

En tanto el Gobernador Francisco Muñoz expreso que "la primera responsabilidad es de la comunidad, si bien existe todo un esfuerzo de Gobierno por desplegar a los funcionarios para garantizar un consumo seguro, resulta de vital importancia que las personas prefieran sólo mariscos cocidos, no es necesario arriesgarse, la salud no es un juego", enfatizó Muñoz.



El Vibrio en cifras

Cabe señalar que durante la temporada 2009 – 2010 no se notificaron casos de Vibrio parahemolítico, mientras que en la temporada 2008 – 2009 se registraron 367 casos; en la temporada 2007 – 2008 se notificaron 922 casos y en la temporada 2006 – 2007 se notificaron 412 casos asociados a la bacteria entérica.

El Vibrio parahemolítico es una bacteria entérica cuyo hábitat natural son las costas marinas, pues requiere sal para su desarrollo. La transmisión se produce por la ingestión de mariscos, especialmente bivalvos, crudos o mal cocidos, también se puede transmitir por contaminación cruzada de alimentos. Existe mayor probabilidad de adquirir la infección en los meses más cálidos.